¿Cuáles son los mejores mercadillos de navidad de Europa?
Entre los mejores mercadillos de navidad de Europa tenemos: Colmar, Helsinki, Berlín, Dresden, Budapest, Viena, Cracovia, Copenhague, Tallin, e Innsbruck son ciudades que, entre los meses de noviembre y enero, acogen los mejores mercadillos de Navidad de Europa. En esta época, sus calles se llenan de luces, árboles de navidad, guirnaldas y casetas entre las que pasearse y disfrutando del ambiente festivo. Olores, colores, sabores y sonidos que harán que os invada el auténtico espíritu navideño.
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Colmar (Francia)
Durante todo el año Colmar es un cuento de navidad, pero en diciembre la magia del adviento lo hechiza todo, contagiando cada fachada y cada baldosa de las pintorescas calles de este pueblo escondido en la Alsacia francesa. Se celebran en total seis mercadillos navideños, y cada con una temática diferente, desde uno especializado en productos gourmet a otro especialmente diseñado para los niños, convirtiendo a Colmar en un paraíso para los más pequeños. También debéis echar un vistazo a los pueblos vecinos, porque ocultan verdaderas maravillas de mercadillos navideños de puro cuento: Eguisheim, Ingersheim, Wintzenheim…
Helsinki (Finlandia)
El mercadillo navideño de Helsinki, instalado en la Plaza del Senado, justo a los pies de la catedral y a orillas del Báltico, puede presumir de ser el más antiguo del país. Todo lo que se vende en sus más de cien puestos de estética tradicional está realizado por los propios comerciantes. Figuritas de madera, velas, bisutería, prendas de lana y muchos dulces típicos: probar el vino caliente y las gachas navideñas es todo un clásico y una necesidad para entrar en calor.
Berlín (Alemania)
La capital alemana acoge unos sesenta mercados de navidad en bulevares, plazas, calles estrechas y museos. Uno de los mercados navideños imprescindibles de Alemania es el que se instala frente al Palacio Barroco de Charlottenburg. Con el castillo de fondo, es uno de los más bonitos de la capital alemana. En él se puede adquirir artesanía y bisutería de calidad y llama la atención porque en las casetas hay calefacción, hecho que se agradece en la navidad berlinesa.
Dresde (Alemania)
El segundo mercadillo de adviento que merece la pena y es uno de los más antiguos del continente. Hablamos del Striezelmarkt, cuya celebración se remonta al siglo XV. Tiene lugar en la Plaza de Altmarkt, presidido por una alta pirámide y se instala durante la temporada de noviembre a diciembre con representaciones teatrales, exposiciones y muchos más atractivos.
Budapest (Hungría)
La explanada frente a la Basílica de San Esteban se convierte en un escenario de luces doradas y decoración navideña entre los meses de noviembre y principios de enero. El medio de la plaza lo ocupa un enorme árbol de Navidad con luces de colores que se alza imponente sobre los puestos de comida húngara y artesanías. La belleza del mercadillo navideño de Budapest ha hecho que sea considerado como uno de los mejores mercadillos de navidad de Europa.
Por otra parte, la Ópera de Budapest suele acoger en estas fechas el recital de El Cascanueces. Sin duda, una de las melodías que más suenan en infinidad de películas de navidad. Si no os lo queréis perder, debéis reservar las entradas con tiempo, ya que se agotan fácilmente.
Viena (Austria)
En la Plaza del Ayuntamiento de Viena se hace magia en navidad. El nombre ya lo anuncia: “Magia de Adviento en Viena”. Así se llama el mercadillo navideño que convierte el centro de Viena en un escenario de película con casetas navideñas de talleres, comida y ponche caliente. Nada como pasear entre sus puestos disfrutando del ambiente festivo y de la iluminación de la romántica capital de Austria.
Os aconsejamos también hacer una excursión a Salzburgo que también cuenta con mercadillos realmente bellos y hasta un museo dedicado a la Navidad.
Craiova (Rumanía)
Con una fascinante ubicación entre los Cárpatos y el Danubio, Craiova es uno de los destinos más desconocidos y hermosos del viejo continente y aquí, la Navidad es lo más parecido a un cuento de hadas cubierto de blanco. El municipio de Craiova distribuye la celebración en cuatro zonas: la Plaza Mihai Viteazul, el casco antiguo Plaza Frații Buzești, la Plaza William Shakespeare y la zona de Doljana. Cada una de ellas acogerá distintos eventos, mercados, conciertos, talleres, puestos de comida y, la pista de patinaje sobre hielo y la noria más alta de Rumanía.
Los cuatro lugares están unidos por luces navideñas, árboles de navidad, cortinas de luz y figuras luminosas. En total, dos millones de bombillas que hacen de Craiova no sólo uno de los mejores mercados navideños de Europa, sino también el mejor destino de iluminación navideña de Rumania.
Copenhague (Dinamarca)
La capital danesa es la típica postal navideña en la que todos querríamos vivir. Tanto que incluso tiene un parque casi temático, los Jardines del Tívoli, abierto durante todo el año, aunque la experiencia invernal de estas fechas no se parece a la de ninguna otra estación: pista de patinaje, tiovivo, feria, fuegos artificiales… y todo ello adornado con más de 500.000 luces led. Su mercado navideño cuenta con alrededor de 60 puestos de artesanía. Lo más tradicional es el vino calentito aromatizado con especias (lo llaman glögg) y va acompañado de un bollito relleno de mermelada (æbleskiver).
Tallin (Estonia)
Recibió el premio al más bonito de Europa en 2019. El Centro Histórico Medieval de la capital de Estonia es un escenario perfecto para albergar uno de los mejores mercadillos de navidad de Europa. Pasear por sus calles empedradas es como trasladarse a una aldea de cuento de hadas, donde no parece tan imposible encontrarse con un duende navideño en una de sus esquinas. Con un poco de suerte, incluso disfrutaréis de este lugar en un día de nieve.
Innsbruck (Austria)
Los de Innsbruck son algunos de los mercadillos más bonitos que se pueden ver el Tirol. De todos los que se organizan en la ciudad, nos fijamos en el que se instala en su casco antiguo. Es el Christkindlmarkt Altstadt, situado delante del famoso Tejadito de Oro y rodeado de las bellas fachadas medievales del país austríaco. Artesanía tirolesa, adornos navideños alpinos, velas, galletas de jengibre y otros pasteles típicos es lo que se encuentra en cada puesto. A las 17:00 horas las trompetas interpretan la clásica música de adviento. Y si queréis más, podéis ir hasta la calle principal de la ciudad, Maria -Theresien-Strasse, o al Mercadillo Panorámico a 860 metros de altura de Hungerburg (hay que coger el funicular de Nordkettebahn).
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